Distribuir vs. Compartir un tratado.
04.11.2011 10:59
Existe una gran diferencia entre lo que es distribuir y lo que comprende compartir un tratado bíblico. Cuando examinamos el diccionario el mismo nos informa que verbo distribuir conlleva el “entregar una mercancía”. Sin embargo, el verbo compartir además de “repartir, dividir, distribuir algo en partes”, conlleva “participar en algo”. Por ello, cuando nos enfocamos en simplemente entregar a otras personas un tratado bíblico sin más, estamos realizando un acto de distribución. Por otra parte, cuando además de entregar el tratado bíblico entramos en algún tipo de actividad ulterior con el destinatario, tal como explicarle el contenido del tratado, presentarle el plan de salvación o invitarlo a que tome alguna decisión en cuanto a su relación con Dios, estamos compartiendo el tratado.
Dependiendo de las circunstancias particulares de cada caso y del lugar en que nos encontremos deberemos decidir si conviene compartir o solamente distribuir un tratado bíblico. En ocasiones, con meramente distribuir el tratado puede llenarse el objetivo de evangelizar al individuo. Mientras que en otros momentos, las necesidades específicas del caso pueden motivarnos o el Señor inquietarnos a ir un poco más allá y compartir el tratado con la persona más sosegadamente. Por otro lado, debemos ser precavidos de no tratar de forzar en convertir lo que debería ser una simple distribución de un tratado en un acto de compartir el mismo, pues podríamos malograr el objetivo de Dios con la vida que recibe el tratado y provocar que cierre las puertas de su corazón al evangelio.
Pídele siempre al Señor que te ilumine a distinguir en cada caso, entre si te hallas en un escenario en el cual es necesario distribuir o compartir el tratado bíblico. Ello puede hacer la diferencia e influir en cuán efectivo será el mensaje en la vida del individuo que lo recibe.